Sergio Berni fue denunciado por lavado, enriquecimiento ilícito, evasión agravada y falsedad documental ante la Procelac luego de que se conociera que el ministro de Seguridad bonaerense tiene una casa no declarada en Bariloche que está valuada en 1 millón de dólares y además cuenta con otros tres departamentos en esa ciudad que tampoco consignó.
La denuncia la presentaron los diputados Juan Manuel López y Mónica Frade, quienes también involucraron a la esposa de Berni, la diputada del Frente de Todos Agustina Propato. «Sus cargos los obligan a presentar anualmente las declaraciones juradas patrimoniales, previstas justamente para prevenir la comisión de ilícitos en el ejercicio de la función pública», sostienen en la presentación.
Los diputados denunciantes enumeran una serie de irregularidades en las declaraciones patrimoniales de Berni y Propato y además apuntan a que ninguno de los dos declaró la casa frente al Lago Nahuel Huapi de 1 millón de dólares, ni los 3 departamentos en el centro de Bariloche.
«Las sucesivas declaraciones juradas patrimoniales que se agregan tienen denominadores comunes, esto es: inconsistencias, inmuebles y fideicomisos que ingresan y egresan sin aparente razón, ausencia de erogaciones que se correspondan a las adquisiciones denunciadas, escaso nivel de consumos y consignaciones de precios viles, aun cotejándolos a valores fiscales», explican en la denuncia.
Los diputados sostienen que no se puede explicar cómo hizo Berni para hacer crecer sus bienes un 110% en dólares pasando de un patrimonio declarado de US$1.450.000 a US$3.041.000.
Sobre las propiedades en Bariloche que no declaró en las presentaciones como funcionario público, recién las formalizó en la AFIP «el mismo domingo 20 de noviembre en horas de la tarde, en conocimiento de que el Programa PPT, que conduce el periodista Jorge Lanata, iba a presentar el informe periodístico sobre su crecimiento patrimonial.
Los diputados además afirman en la denuncia que en las declaraciones de Berni pueden verificarse más anomalías. El funcionario registra una embarcación que valúa fiscalmente en la suma de $120.000, pero el valor real fiscal es de unos $3.600.000, muy por encima del precio declarado.
Los diputados en la denuncia también detallan los vínculos de Berni con empresarios de su entorno. Sostiene que el ministro construyó tres unidades funcionales «en terrenos de sus socios, los señores Carlos Rosales y Gustavo Figueroa, este último empleado del Senado de la provincia de Buenos Aires y titular de una empresa off shore radicada en EE. UU. bajo el nombre Miami Truck Logistic . Rosales es un polémico empresario, fue el que compró Garbarino y luego la llevó a la quiebra.